Antiguamente, el municipio de Covelo pertenecía a la provincia de Tuy, uno de los siete reinos históricos de Galicia.
Promulgado el Decreto de Cortes del 27 de enero de 1822, pasa a formar parte de la nueva provincia de Vigo, quedando definitivamente integrado en la provincia de Pontevedra, según el Real Decreto del 30 de noviembre de 1833.
El territorio que actualmente constituye el término municipal de Covelo estaba dividido entre las jurisdicciones de Achas, Covelo y Sobroso, que dependían de los Señoríos del Conde de Salvatierra y del Conde de Amarante.
Su orografía se compone de profundos valles, altas montañas y varios ríos. Teniendo en cuenta las ferias y mercados existentes, además de las condiciones geográficas y poblacionales, el Goberno Civil le otorgó la titularidad de Ayuntamiento el 23 de Julio de 1835, formado en principio por seis parroquias y posteriormente por las catorce actuales, que en su conjunto conforman una población de 4.350 habitantes.
Como anécdota, señalar que los antiguos procuradores de Covelo gozaban del privilegio de no descubrirse la cabeza durante las sesiones judiciales. Dicho privilegio fue confirmado por la Audiencia de Galicia, que dispuso que únicamente permanecerían descubiertos el presidente, el secretario y un escribano. En los archivos hay evidencia de la importancia de este histórico municipio, que fue uno de los más fuertes y prestigiosos de antaño.
El municipio de Covelo forma parte de la comarca de “A Paradanta”, junto con los ayuntamientos limítrofes de Crecente, Arbo y A Cañiza.
Las parroquias dependen eclesiásticamente de la diócesis de Tui-Vigo.